TAMAULIPAS.- Aunque la zona hotelera ya opera, la playa Miramar sigue cerrada al turismo.
Los hoteleros de la zona operan apenas al 50 por ciento de su capacidad y sus huéspedes no pueden acceder a la playa.
Las restricciones de los hoteles, por el momento, incluyen que en el área de restaurantes el aforo no sea mayor al 25 por ciento, que permanezcan cerrados los gimnasios y la renta de salones para eventos privados.