Cambio

Golpes al narco: menos armas, menos homicidios y menos reclutamiento

CIUDAD DE MÉXICO.– La estrategia federal contra el crimen organizado ha comenzado a debilitar a las dos organizaciones criminales más poderosas del país: el Cártel de Sinaloa y el CJNG. Así lo aseguró el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, tras una reunión con coordinadores parlamentarios en San Lázaro.

Desde el atril, el funcionario detalló que las recientes acciones, particularmente los decomisos en altamar y las detenciones de operadores financieros y logísticos, han logrado un efecto concreto: impedir que estos grupos sigan comprando armas, corrompiendo autoridades o reclutando jóvenes.

Decomisos que duelen a los cárteles

Uno de los datos más contundentes lo dio la Secretaría de Marina: un solo aseguramiento rompió récord con el decomiso de una carga histórica de droga. Tan solo en altamar, la cifra ya supera las 38 toneladas de cocaína incautadas, generando un impacto directo en las finanzas criminales.

Además, en siete meses de la presente administración se han incautado 100 mil armas de fuego y más de 915 laboratorios clandestinos de metanfetaminas han sido destruidos.

“Estos aseguramientos significan millones que los grupos delictivos no pueden invertir en armas ni en captar nuevos jóvenes”, subrayó Harfuch.

Menos homicidios, pero el reto continúa

Uno de los principales indicadores que presenta el gobierno es la reducción de 25% en homicidios dolosos en comparación con el inicio del sexenio. Harfuch matiza: “¿Está resuelto el problema? No. Pero es la cifra más baja desde 2018 y eso debe saberse”.

El Universal publicó que entre los detenidos recientemente hay al menos 14 operadores clave de Sinaloa y el CJNG. Muchos de ellos, cercanos a los círculos de mando, han sido localizados mediante labores de inteligencia, debilitando la estructura logística y financiera de los cárteles.

¿Qué sigue?

Aunque las cifras muestran avances, el panorama sigue complejo. La pregunta no es si los cárteles han sido afectados, sino si el gobierno podrá sostener esta presión sin retrocesos ni pactos ocultos.

La clave, según expertos, será mantener las operaciones de inteligencia, blindar las instituciones locales y evitar que los vacíos de poder generen nuevas disputas.

Porque una estrategia efectiva no solo se mide en decomisos, sino en la capacidad del Estado para evitar que el crimen se regenere en otras formas o regiones.

Salir de la versión móvil