El siete de marzo, el gobierno de la transformación en Tamaulipas publicó dentro de sus boletines que iba a devolver a las mujeres las “Casas Violetas”, (programa que Cabeza de Vaca hizo) y cerro Américo por ser un programa panista. Con bombo y platillo, afirmó que se abrirán, para protegerlas de la violencia que nunca y debieron cerrar sus puertas, además de reconocer que Tamaulipas tiene un gabinete paritario.
La verdad es que a MORENA y su gobierno, no le interesa la violencia contra la mujer, la incita, de muestra, tenemos toda la guerra orquestada desde Palacio Nacional contra la Ministra Presidenta de la Suprema Corte de Justicia, Norma Pina, quien de cartón fue quemada por una turba en la tertulia política del Presidente López el pasado 18 de marzo en el mitin del Zócalo Capitalino.
María de la Luz Santiago Diez de Bonilla no educó bien a sus “gallitos”.
Fueron los mulos, que estuvieron junto a su suegro y su padre, los dos gobernadores de Tamaulipas.
Quedó comprobado el adiestramiento que recibió “Ameriquito”
Ahora sabemos de quién aprehendió a madrear a Brenda, su exesposa, y los demás señalamientos que tiene de violencia contra mujeres. Así como en las peleas de gallos; que cuando pierde quiere incinerar palenques, como en el rally gallero hace un mes en el sur de Tamaulipas.
Desde el mes de octubre; existen 69 carpetas de investigación de feminicidio abiertas en la Fiscalía General de Tamaulipas. Así como más de una centena por los presuntos delitos de agresiones, amenazas, violencia y acoso de diferentes índoles, sexual, laboral, verbal y hasta stalking.
La mujer sufre en Tamaulipas, no solo los embates de la violencia desde casa, sino la institucional porque no encuentran justicia.
El último caso de impunidad burocrática, es el del Tío Batarse… Marco Antonio Batarse, al que el portal nacional México Código Rojo, ayer exhibió por ser un acosador de mujeres.
En la publicación se detalla como 3 mujeres denunciaron al compadre del gobernador morenista Américo Villarreal Anaya, por acosarlas y segregarse por ser de abstracción, panista y priista.
Vaya ficha el que administra la imagen de la Máxima Casa de Estudios, en Tamaulipas.
Un depredador, el cual vieron como figura paterna alterna, Humberto y Américo Villarreal Santiago, junto a sus “primos” Luis, Marco y Jacobo y muchos más.
Vaya engaño que se llevó Doña Maria, darle cabida a quien se le señala como asediador, deja en duda toda la política de violencia contra la mujer del gobierno de la transformación.
Lo malo es que es intocable, es del primer círculo familiar, el cual administra todo el poder, y el dinero.
Una corrupta raya más, al inmamable y tibio Gobernador…
Colofón.
Recuerdo al señor Fernando Acuña Piñeiro llorando y pidiendo consejo legal hace algunos años por escribir en una de sus liturgias, que una Secretaria de Estado fue mesalina del exgobernador Egidio Torre.
Fue demandado por agresión a la dama.
Ese era el arcaico estilo de escribir de los depredadores editoriales, hasta los tiempos del panismo, donde todos los ‘textoservidores’ quedaron fuera.
Hoy, desde su puesto como Director de Comunicación del Sistema DIF, debería tener cuidado en no ocasionar un problema legal a Doña María de la Luz Santiago, cometiendo peculado o conflicto de intereses.
Éticamente y legalmente no puede ser el Santo, prender los cohetes y cargar al niño, aunque quieran pasarse la Constitución por los huevos…
Vaya mal servicio que le están dando al Estado ese departamento fallido de Comunicación Social; con todos los “cachorros del bienestar” deshaciendo la imagen de un gobernador.
A chambear.
@GildoGarzaMx
