Ciudad de México.- En medio de un escándalo de corrupción que sacude a la Ciudad de México, se han filtrado impactantes datos sobre la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum. Fuentes internas de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX revelaron que existen un total de 487 denuncias directas en su contra, las cuales han sido reservadas para evitar dañar su imagen durante su aspiración a la presidencia.
Las fuentes, que prefirieron mantenerse en el anonimato, detallaron que estas denuncias abarcan una amplia gama de delitos graves. Entre ellos se encuentran extorsiones llevadas a cabo por funcionarios vinculados al gobierno de la CDMX, así como casos de gran relevancia, como las recientes tragedias en las líneas del metro que se cobraron la vida de trabajadores y las jóvenes hermanas Esmeralda y Sofía, quienes fallecieron tras caer en una coladera en la alcaldía Iztacalco.
Además, se ha denunciado corrupción en procesos de recompras y contratos durante la emergencia sanitaria por el COVID-19, lo que ha generado un enorme descontento entre los ciudadanos. Sin embargo, estas acusaciones están siendo ocultadas por instrucción de la fiscal Ernestina Godoy, quien ha argumentado que no existen fundamentos sólidos para sustentarlas.
Ante las solicitudes de transparencia y las peticiones legales para revelar la información, la respuesta de las autoridades ha sido evasiva. «Es importante señalar que, por razones jurídicas, no podemos confirmar ni negar la existencia de denuncias penales o carpetas de investigación relacionadas con la persona mencionada», declararon.
Estas revelaciones han generado indignación entre la población, que exige una investigación exhaustiva y transparente para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia. La corrupción es un cáncer que debilita nuestras instituciones y pone en riesgo la confianza de los ciudadanos en sus líderes políticos.
Ante la gravedad de estas acusaciones y la necesidad imperante de combatir la corrupción, resulta fundamental que las autoridades actúen de manera diligente y transparente, sin privilegios ni impunidad. La ciudadanía merece respuestas claras y contundentes, así como un compromiso real para erradicar la corrupción en todas sus formas y niveles.
Es momento de que la justicia prevalezca y se restaure la confianza en nuestras instituciones. Los ciudadanos exigen una rendición de cuentas genuina y una actuación firme por parte de las autoridades para acabar con la corrupción que tanto daño ha causado a nuestra sociedad.