Tamaulipas enfrenta un panorama desafiante para el próximo año, con la noticia de que el Laboratorio Social de Morena en el estado aplicará menos recursos públicos en gasto federalizado para el 2024. Esta preocupante decisión plantea serios interrogantes sobre la prioridad que el partido oficialista da a la prosperidad de la región y a las necesidades de sus ciudadanos.
El presidente de la Comisión de Presupuesto en la Cámara de Diputados, Erasmo González Robledo, quien actualmente corretea la alcaldía de Madero por Morena, está en el centro de esta polémica. Junto con Américo Villarreal Anaya, parece estar dispuesto a infligir un golpe irreparable al presupuesto federal para el próximo año, lo que podría resultar en un aumento del despilfarro de recursos para campañas políticas de Morena en el 2024. Este giro inesperado en las políticas de asignación de recursos es inquietante y sus repercusiones podrían ser graves.
El diputado federal del PAN, Gerardo Peña, advierte que Tamaulipas tendría un recorte de 512 millones de pesos en el presupuesto de la Federación en 2024. Esto sin contar otros rubros, lo que dejaría un déficit de aproximadamente 2 mil millones de pesos en recortes.
El recorte propuesto asciende a dos mil millones de pesos menos de lo aprobado en el 2023, y también se contemplan varios recortes en las participaciones destinadas a distintos rubros. Entre los más afectados se encuentran áreas críticas como la infraestructura carretera, la seguridad y la salud. Estos recortes representan una amenaza real para el bienestar de los tamaulipecos y su acceso a servicios básicos y seguros.
Además, la falta de acción y la aparente indiferencia de Américo Villarreal Anaya, quien gobierna desde la Ciudad de México y no parece estar preocupado por Tamaulipas, agravan aún más la situación. Esta ausencia de liderazgo y atención hacia las necesidades locales es lamentable y refuerza la sensación de abandono por parte de los representantes de Morena en el estado.
Las redes sociales han sido un foro de expresión para la indignación de muchos tamaulipecos ante esta situación. Las críticas se centran en que Morena no está cumpliendo con su compromiso presidencial de mejorar la situación del estado, y que, por el contrario, están dañando, abandonando y traicionando a los ciudadanos.
La falta de inversión en infraestructura carretera, seguridad y salud representa un serio revés para la calidad de vida en Tamaulipas. Los problemas en las calles, la falta de servicios básicos como agua potable, drenaje y recolección de basura, así como la carestía de medicamentos y vacunas, son consecuencias directas de esta falta de inversión.
La pregunta que se impone es si los tamaulipecos pueden esperar un cambio en esta situación. La realidad es que, con los recortes propuestos, Tamaulipas es uno de los estados que más perderá en el proyecto de presupuesto de la Federación para el 2024. Esto plantea una interrogante importante sobre la coherencia y el compromiso del Gobierno de Morena con la región.
Se hace un llamado a los diputados federales de Morena que representan a Tamaulipas para unirse a sus colegas de Acción Nacional y exigir justicia presupuestal para el estado. Esta es una oportunidad para demostrar que están comprometidos con el bienestar de la región y sus ciudadanos.
