Guerrero.- Mientras el Gobierno Federal continúa culpando a la oposición, la negligencia del ejecutivo y la falta de advertencia por parte de Protección Civil, las consecuencias devastadoras del huracán Otis se manifiestan de manera cruda en Acapulco. Rosa Gómez Martínez, directora de Reglamentos y Espectáculos, ha declarado que más del 80 por ciento de los bares y restaurantes de la ciudad han sufrido «pérdida total» en sus instalaciones.
Los establecimientos, pilares de la economía local y destinos turísticos, como La Hamaca, City, Euforia, La Terraza, y Red Lion, se encuentran con daños severos en sus inmuebles, con vidrios destrozados y fachadas devastadas.
La directora de Reglamentos ha mencionado que varios empresarios se han acercado al gobierno municipal buscando apoyo para la reconstrucción de sus negocios afectados por el huracán.
Mientras brigadas de limpieza trabajan en la zona Diamante y el área del Aeropuerto, Rosa Gómez Martínez ha subrayado la magnitud de la tragedia, afirmando: «El 80 por ciento de bares, restaurantes y discotecas han sufrido pérdida total».
Álvaro Soriano, presidente de la Unión de Bares de Acapulco, ha compartido su perspectiva desgarradora sobre la situación, señalando que «nuestro sector está muy dañado». Según él, en un recorrido desde Costa Azul al Parque Papagayo, el 90 por ciento de los negocios ubicados en la franja turística se encuentran en ruinas.
Soriano también ha expresado su sorpresa ante la magnitud de la destrucción, enfatizando que nunca habían enfrentado un huracán de categoría 5. A pesar de la comunicación y evaluación del fenómeno realizadas por el Gobierno Municipal, la naturaleza demostró ser impredecible en su ferocidad.
La comunidad de Acapulco se encuentra en medio de una tragedia sin precedentes, y la recuperación será un largo y arduo proceso.
