San Diego, California. Octubre 30, 2024 — Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública en México y figura central en la lucha antidrogas durante el sexenio de Felipe Calderón, presentó una apelación a su condena de 38 años de prisión impuesta en una corte de Nueva York. La defensa de García Luna argumenta que el proceso judicial estuvo lleno de irregularidades, asegurando que la sentencia es excesiva y que los cargos no fueron probados adecuadamente.
La condena, dictada a principios de este año, respondió a múltiples acusaciones de colaboración con el Cártel de Sinaloa, sobornos, y tráfico de drogas hacia Estados Unidos, cargos que, según las autoridades estadounidenses, confirman la complicidad de García Luna en redes criminales de alto nivel. Durante el juicio, testimonios como el de Sergio Villarreal Barragán, alias “El Grande”, describieron una estructura de corrupción dentro de la Policía Federal que, bajo la dirección de García Luna, operaba para proteger y facilitar el negocio del cártel de Joaquín «El Chapo» Guzmán.
La apelación del exfuncionario promete prolongar la batalla legal en su contra, buscando impugnar los testimonios presentados y las pruebas que, según la defensa, fueron interpretadas de manera parcial por el tribunal neoyorquino. Hasta ahora, el proceso ha despertado el interés de la opinión pública y ha reabierto el debate sobre la supuesta complicidad de altos mandos del gobierno mexicano con el crimen organizado, poniendo en cuestión la efectividad y la ética de la llamada «guerra contra el narco».
Mientras tanto, diversas figuras políticas y de derechos humanos observan de cerca la apelación, planteando interrogantes sobre el impacto que este proceso judicial podría tener en otras investigaciones en curso contra exfuncionarios mexicanos vinculados a la corrupción y el narcotráfico.