Ciudad Victoria, Tamaulipas. – Los regidores de Movimiento Ciudadano no solo están frustrados, están hartos. Este viernes, cuestionaron abiertamente la facultad del secretario del Ayuntamiento, Hugo Reséndez Silva, quien convocó a una sesión extraordinaria a última hora, solo media hora después de que ellos, junto a otros 14 regidores inconformes, solicitaron lo mismo por escrito. El objetivo de ambos grupos es claro: desenterrar el gabinete que Eduardo Gattás Báez mantiene enterrado, dejando al municipio en un estado de parálisis administrativa.
El regidor Daniel Pérez, con evidente exasperación, dejó claro que este “juego” político ha durado demasiado. «Estamos a casi un mes de esta nueva administración y seguimos sin resolver la votación del gabinete», declaró. No solo se trata de un acto de negligencia política, sino de una estrategia bien orquestada por Gattás para seguir manipulando los hilos del poder municipal, con sus aliados bloqueando cualquier intento de transparencia.
La sombra de Reséndez Silva y un proceso sin legitimidad
Lo más alarmante es que Reséndez Silva, quien convocó a esta sesión, ni siquiera tiene el respaldo del Cabildo. Se mueve en la sombra, operando a espaldas de los regidores y del proceso democrático. «Queremos saber por qué convoca a una sesión, si está dentro de las ternas que aprobó el presidente municipal sin el voto del Cabildo», cuestionó Pérez, poniendo en duda la legitimidad de las decisiones que se están tomando en el Ayuntamiento.
La realidad es que los 15 regidores inconformes no están buscando revanchas políticas, sino soluciones para un municipio que se desmorona. «Nosotros no estamos del lado de nadie, pero estamos cansados de ver cómo se juega con el futuro de los jóvenes y de las personas en nuestro movimiento», agregó Pérez. Este tipo de declaraciones reflejan el hartazgo de una comunidad política que se siente traicionada por un gobierno que prometió cambio y solo ha entregado caos.
Gabinete fantasma: sin trayectorias ni claridad
Por su parte, la regidora Melissa Mireles expuso la falta de transparencia en el proceso de selección del gabinete. A pesar de la convocatoria a una sesión para revisar los perfiles, destacó que no se ha llevado a cabo ninguna reunión previa para analizar las trayectorias de los candidatos. «Desconocemos qué trayectorias tienen, qué perfiles son. Esto nos complica a nosotros como regidores», confesó Mireles. Lo que está en juego no es solo la elección de unos cuantos funcionarios, sino la credibilidad de toda la administración municipal.
En Ciudad Victoria, el gobierno de Gattás Báez sigue operando en la penumbra, sin dar cuentas a nadie y menos a los ciudadanos. Este vacío de poder no solo paraliza al municipio, sino que deja claro que la corrupción y el abuso de autoridad son el verdadero motor de su gestión.