- Advertisement -spot_img
InicioDestacadaClaudia Sheinbaum: “Colaboramos con respeto, pero México no se subordina”

Claudia Sheinbaum: “Colaboramos con respeto, pero México no se subordina”

T-MEC: La clave para enfrentar a China en el tablero económico mundial

- Advertisement -spot_img

En el corazón de Nuevo Laredo, una de las fronteras más activas del mundo, la presidenta Claudia Sheinbaum delineó un plan estratégico: consolidar la integración económica de América del Norte para enfrentar la creciente influencia de China en el comercio global. Durante el evento Programas Sociales para el Bienestar en el Polyforum La Fe, y acompañada por el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, Sheinbaum destacó que la colaboración entre México, Estados Unidos y Canadá debe ser un pilar para garantizar la prosperidad regional y contrarrestar los desafíos económicos globales.

“Entre nosotros no hay competencia, al contrario, nos complementamos. Esto nos permite ser una de las regiones más vigorosas e importantes del mundo”, afirmó Sheinbaum, subrayando que el T-MEC es la clave para mantener esa posición frente a China, cuyo crecimiento comercial sigue marcando el ritmo de las economías emergentes.

La fuerza de la frontera

Los números no mienten. Cada día, entre México y Estados Unidos cruzan:

  • 70 mil tractocamiones con mercancías esenciales para ambas economías.
  • Un millón de personas, fortaleciendo el intercambio cultural y laboral.
  • 240 mil vehículos particulares, que reflejan el dinamismo de la interacción transfronteriza.

Estas cifras confirman que la frontera norte es mucho más que un límite geográfico; es el motor de una de las economías regionales más importantes del mundo, que genera el 30 % del PIB mundial.

Un llamado a la acción conjunta

De cara a la revisión del T-MEC en 2026, Sheinbaum planteó un enfoque innovador: avanzar hacia la independencia económica de América del Norte respecto a otras regiones del mundo, particularmente Asia. Este esfuerzo implicaría fortalecer sectores estratégicos como el automotriz y el tecnológico, donde México ya desempeña un papel clave como proveedor de mano de obra especializada y manufactura avanzada.

Además, hizo un llamado a abordar problemas compartidos, como el tráfico de drogas y armas. “Allá (Estados Unidos) consumen drogas, y aquí nos generan violencia. Este círculo solo puede romperse con cooperación respetuosa y efectiva”, aseguró.

Sheinbaum enfatizó que la relación con Estados Unidos debe basarse en la colaboración, pero siempre desde una postura digna y soberana. “Colaboramos, cooperamos, pero nunca nos subordinamos”, sentenció.

Desafíos inmediatos y soluciones propuestas

El panorama no está exento de retos. Entre ellos, las recientes declaraciones de Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, quien ha amenazado con imponer un arancel del 25 % si México no intensifica los esfuerzos para controlar la migración.

Sheinbaum respondió con una carta diplomática, señalando que México ya implementa acciones concretas para atender la situación migratoria y que cualquier medida punitiva impactaría negativamente a ambas naciones, especialmente al sector automotriz estadounidense, que depende en gran medida de insumos mexicanos.

En este contexto, Sheinbaum propuso una serie de acciones concretas:

  1. Impulsar la producción regional: Reducir la dependencia de insumos asiáticos fortaleciendo las cadenas de suministro locales.
  2. Frenar el tráfico de armas: Intensificar la cooperación binacional para detener el flujo ilegal desde Estados Unidos hacia México.
  3. Desarrollar programas sociales transfronterizos: Establecer esquemas que beneficien directamente a las comunidades migrantes y refuercen la seguridad en la frontera.
  4. Proteger el comercio justo: Asegurar que las revisiones del T-MEC prioricen la equidad económica entre las tres naciones.

Un futuro regional en juego

La discusión sobre el T-MEC y su renovación en 2026 es más que un tema comercial; es un debate sobre el futuro económico de América del Norte. En un contexto global cada vez más polarizado, donde el dominio de China amenaza con reconfigurar las dinámicas comerciales, México, Estados Unidos y Canadá tienen la oportunidad de consolidar una alianza económica que no solo les permita competir, sino liderar.

Las palabras de Sheinbaum dejan claro que México no solo busca ser un participante pasivo, sino un actor activo en la construcción de una región más integrada, próspera y equitativa. Ahora, el desafío será transformar estas promesas en acciones concretas que beneficien tanto a las grandes economías como a los ciudadanos de a pie, quienes sienten el impacto de estas decisiones en su día a día.

Con visión y cooperación, América del Norte podría no solo competir con China, sino convertirse en un modelo global de integración económica y social.

 

- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img
Stay Connected
3,300FansMe gusta
6,244SeguidoresSeguir
200SuscriptoresSuscribirte
Must Read
- Advertisement -spot_img
Related News
- Advertisement -spot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí