Para que Américo Villarreal Anaya se convierta en un candidato competitivo tiene que hacer muchas cosas que no le gustan, que no van con su personalidad, porque nunca ha necesitado de nadie para triunfar en la política.
Y es que llegó al senado de la República por el apoyo que le dio del presidente Andrés Manuel López Obrador y nunca necesitó pedirle a nadie que le ayudara a ganar.
Sin embargo, en esta elección va solo en la boleta y tiene que pedir ayuda para, que al menos, se convierta en un buen competidor y deberá comprometerse a cumplir con sus acuerdos.
Además, tendrá que convertirse en un conciliador para que los morenistas lo apoyen y se unan a su proyecto, porque sin un dirigente estatal en MORENA, no hay quien los coordine y eso será lo más complicado que tendrá que hacer.
Lo que sucede es que Erasmo González Robledo y Olga Sosa Ruiz por su protagonismo han fracturado la relación de los presidentes municipales y diputados locales de MORENA con el doctor, bueno, hasta el mismísimo diputado Armando Zertuche ya no los tolera.
Desde luego que esto complica la operación electoral y de promoción de Villarreal Anaya, ya que su proselitismo se basa en lo que los alcaldes y legisladores hagan en sus municipios y distritos.
Así que Américo Villarreal tiene que actuar de inmediato para que no lo dejen solo con los amigos de Carmona, quienes por su conducta dan la impresión, que siguen con el plan que habían establecido con el difunto.
Por lo pronto, se sabe que en Reynosa tiene problemas para que los morenistas de ese municipio lo acompañen en su cierre de precampaña y JR Gómez siendo el responsable de este municipio, está invitando a morenistas de otros municipios para que acompañen al doctor.
Claro que esto es resultado de la falta de sensibilidad y tacto político que tiene Villarreal Anaya para tratar a Maki Ortiz y a su hijo Carlos Peña, quienes así respondieron por ser ninguneados cuando dijo que eran sólo dos votos y ahí están las consecuencias.
Y ni que decir con los diputados locales quienes han decidido en no ir a Reynosa sino pone en orden a Olga Sosa quien, por su actitud prepotente y protagonista, ha distanciado a los legisladores con el doctor y esto no es nada bueno.
Ya que la ex candidata perdedora de Tampico ha distanciado a Mario “La Borrega” López del precandidato y esto, pudiera repercutirle en el momento de la votación, ya que el alcalde de Matamoros por esto y otras cosas más, ahora está más cerca del Truco que del mismo doctor.
Lo peor del caso para Américo es que los beneficiarios de los programas sociales del gobierno federal, ya saben que AMLO no les quitará sus apoyos, están establecidos en la constitución y pueden votar libremente sin rendirle cuentas a MORENA.
En fin, si el doctor Américo Villarreal no pone orden en sus filas, no toma el mando de MORENA en Tamaulipas y no controla la coordinación de su precampaña, y se mantiene pasivo ante estos problemas, es seguro que siga bajando en el posicionamiento que muestran las encuestas, por lo que ahora tendrá que hacer lo que no le gusta, que es dialogar, conciliar y negociar, si es que quiere ganar. Así de simple.
Para finalizar, dice el Cachorro del PAN que el diputado Gustavo Cárdenas Gutiérrez se ha convertido en palero y comparsa de la bancada de MORENA y esto le da un buen raspón a su papel de político conciliador.
De tal manera, que se acerca más a MORENA y si Dante Delgado se llega a enterar, pudiera desheredarlo por su preferencia con los morenistas.
Se sabe que en esta ocasión se alió con MORENA para evitar que hubiera cuórum en el pleno del Congreso, para que así, no se llevara a cabo el trabajo legislativo y desde luego que esto benefició a los morenistas.
De salida, Si Gerardo Peña no pone orden en La Pesca y va directamente a platicar con los que se dicen ser los dueños de los terrenos de la playa, la insurrección podría desbordarse y afectar el proyecto del Truco por lo que están muy a tiempo para detener esas protestas y lograr una vez más que reine la concordia y la armonía entre los habitantes de La Pesca y las autoridades estatales. Ni más ni menos.
Oscar Contreras Nava.