En la inauguración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), no ha faltado la vendimia de antojitos, como las tlayudas que vende Carmen en 35 pesos cada una.
La mujer, de 34 años de edad, aprovechó el gentío que se trasladó al nuevo aeropuerto para vender tlayudas.
Viene acompañada de su marido y sus tres hijos desde Toluca. Dice que hay que aprovechar la inauguración para vender y «sacar un poco más».
«Me dieron permiso y aproveché, además no me cobraron nada por ponerme aquí».
La gente hizo una larga fila para comprarle, pues en esta terminal aérea no hay ningún local comercial que venda alimentos. Sólo está abierto un Starbucks que por hoy regaló café negro y una rebanada de pan, mismos que se les terminaron en poco más de una hora.
Por momentos, Carmen y su esposo no se dan abasto para preparar las tlayudas, a las que embarran con frijoles para ponerles nopales, queso y cebolla.
Mueven rápidamente las manos porque no sólo les piden una, sino hasta 10 de un jalón. Sus pequeños hijos los observan sentados cómo sus padres preparan una a una cada tlayuda.