Guanajuato.- El diputado local de Morena con licencia, Ernesto Prieto, denunció que la regidora Lourdes Romero y varias personas más fueron agredidas la tarde de este martes cuando promovían la Consulta de Revocación de Mandato en la Plaza Principal de Irapuato, por un hombre que dijo se encuentra vinculado con el PAN.
El legislador, también presidente estatal de Morena con licencia, realizó la denuncia en sus redes sociales y su equipo compartió un video en el que se ve a un hombre de camiseta azul que discute con varias personas vestidas con playeras con las siglas AMLO, que avienta y patea a una de ellas, y luego a otras que lo rodean.
En la grabación también se ve que el individuo de azul recibe zapes, entre varios lo someten y tiran al piso. Asimismo, en la escena está una mujer de saco verde que toca al joven de azul y repite la palabra “¡No!”.
En el video el joven de azul aparece con una boleta publicitaria de la consulta de revocación de mandato en las manos.
Esta tarde Prieto Gallardo precisó que el evento ocurrió en la Plazuela Hidalgo, a menos de 500 metros de la Presidencia Municipal y que la Policía tardó media hora en responder al reporte.
“En el municipio de Irapuato: un grupo de ciudadanos, entre ellos mi compañera regidora Lulú Romero se encontraban llevando a cabo labor de informar, de invitar a la ciudadanía a participar el próximo 10 de abril en esta consulta popular para la revocación de mandato… del presidente Andrés Manuel López Obrador y de repente llegó un energúmeno que resulta que está vinculado a Acción Nacional y agrede cobardemente a mis compañeros”.
Exigió a la alcaldesa de Irapuato, Lorena Alfaro, que tome cartas en el asunto, que no tolere ninguna clase de agresión, ni proteja al responsable.
También pidió al Gobierno del Estado y a los alcaldes que garanticen que la jornada previa al 10 de abriltrascurra en armonía y en paz.
El legislador con licencia dijo tener conocimiento que en el DIF estatal y en la Presidencia Municipal de León se está amedrentando a los servidores públicos para que no acudan a la consulta del domingo, con la amenaza de que serán despedidos si el lunes llegan con el dedo pintado.
