En medio de un creciente conflicto en el Tribunal Electoral de Tamaulipas (Trieltam), el magistrado René Osiris Sánchez Rivas acusó al presidente de dicho órgano, Edgar Danés Rojas, de desacatar una orden directa de la Sala Regional Monterrey, generando tensiones sobre la imparcialidad en la calificación de la elección de Nuevo Laredo.
El conflicto estalló luego de que la Sala Regional Monterrey instruyera al Trieltam a revisar el proceso de calificación de la elección en Nuevo Laredo, debido a un evidente conflicto de intereses: Eliud Danés Rojas, hermano de Edgar Danés Rojas, es empleado de la actual alcaldesa Carmen Lilia Canturosas Villarreal, quien busca la reelección. Pese a esta clara advertencia, Danés Rojas se negó a excusarse de participar en el caso.
Sánchez Rivas, en una sesión pública, reveló que el pasado sábado, durante una reunión privada, Danés Rojas se asignó el expediente, preparó el proyecto de resolución y votó a favor de declararse apto para continuar en el proceso, ignorando la recusación presentada por el Partido Acción Nacional (PAN). Según Sánchez Rivas, esta acción constituye un desprecio flagrante hacia las normas que regulan el proceder del tribunal y una burla hacia las instituciones de justicia.
En su intervención, Sánchez Rivas fue contundente al señalar que Danés Rojas ha vuelto a cometer la misma falta, indicando que su conducta pone en riesgo la integridad del proceso electoral. Con evidente frustración, expresó que el presidente del Trieltam «vuelve a violentar la ley» y advirtió que, de continuar con esta actitud, las sentencias federales podrían terminar imponiendo el cumplimiento de las normas a la fuerza.
Aunque en una sesión privada Danés Rojas fue excusado de seguir interviniendo en el caso, la controversia no ha terminado. El comportamiento del presidente del Trieltam no solo ha causado un malestar profundo entre sus colegas, sino que también ha generado dudas sobre la legitimidad del proceso electoral en Tamaulipas. Las palabras de Sánchez Rivas reflejan un descontento generalizado con la actuación de Danés Rojas, quien parece desafiar abiertamente la autoridad de la Sala Regional Monterrey.
