Chilpancingo, Guerrero.— La violencia sigue azotando sin piedad a Acapulco, sin que las autoridades logren poner un freno. Este domingo, la madrugada se tiñó de sangre cuando un ataque armado cobró la vida de cuatro hombres y una mujer en el poblado de El Cayaco, a las afueras de un taller mecánico.
El informe policiaco detalla que, alrededor de la 1 de la mañana, un grupo de personas se encontraba conviviendo en las inmediaciones del taller, situado sobre la carretera federal Acapulco-Pinotepa Nacional, cuando hombres armados llegaron a bordo de una camioneta. Sin mediar palabra, los atacantes abrieron fuego, rafagueando el lugar y dejando a las víctimas sin posibilidad de huir.
Este incidente se suma a una larga lista de hechos violentos en una ciudad que enfrenta una crisis de inseguridad sin precedentes, donde la vida parece estar a merced de grupos criminales que actúan con total impunidad. La falta de respuesta efectiva por parte de las autoridades incrementa la indignación entre los ciudadanos, quienes exigen mayor protección y justicia ante un panorama cada vez más desolador.
Hasta el momento, las autoridades no han dado información sobre detenidos ni han ofrecido una postura clara sobre la escalada de violencia en la región. Mientras tanto, el temor y la inseguridad continúan reinando en las calles de Acapulco.
