Así, con todas sus letras.
Nahle, Romero y López Obrador quebraron a Pemex.
No hay justificación que valga.
No son los gobiernos anteriores.
No es el saqueo.
Las cosas no estaban bien, pero ellos las empeoraron.
Las empeoraron por sus dogmas idiotas.
Por la «soberanía energética», que nunca va a ser porque los números son fríos.
Por el creer que Pemex es la «palanca de desarrollo». Lo fue, pero ya no más.
No hay un resultado contable, y auditable, que refute lo que digo.
Pemex opera con pérdidas haga lo que haga.
Si extrae, pierde.
Si refina, pierde.
Tras dos años de gestión obradorista, la petrolera ha roto récords de pérdidas y de deuda.
Ha perdido la calificación crediticia por sus malos resultados y el trío culpa a las calificadoras.
Ayer fue el colmo.
Nahle propuso, evidenciando su ignorancia, usar las reservas internacionales del Banco de México para salvar a Pemex.
Los del Consejo hasta la felicitaron por su brillante idea.
Banxico dijo No.
Ya no tienen de donde echar mano.
La deuda ya equivale al 97% de los activos.
Para dimensionar las cosas, las pérdidas de Pemex superan el costo del Fobaproa completo con todo e intereses…
Y contando.
Cualquier desfalco de gobiernos pasados es inferior a lo que han perdido Lopez y sus secuaces.
Jiribilla
Quienes iban a rescatar a Pemex, terminaron asesinándolo.
Estan quebrando al país con su incapacidad
