Adquirido durante el sexenio de Felipe Calderón por el Gobierno de Hidalgo en 2009, el terreno de 700 hectáreas significó una erogación de 1500 millones de pesos, dando un costo por hectárea de 2.14 millones de pesos, lo que arroja un costo por metro cuadrado de 214 pesos.

Adicional a ese gasto, el Gobierno de Felipe Calderón erogó aproximadamente 250 millones de pesos para edificar la barda perimetral del que sería el complejo petroquímico Bicentenario. Sin embargo, al realizar estudios de factibilidad en 2012, la obra quedó suspendida y se dejó al entonces gobierno entrante de Enrique Peña Nieto la responsabilidad de decidir si la obra se llevaría a cabo o no.

En 2013, Gobierno de Enrique Peña Nieto decidió cancelar dicho proyecto y destinar recursos a optimizar las refinería existentes.

Aumento por plusvalía

De acuerdo con una investigación hecha por reporteros de este medio y en colaboración con medios locales, el crecimiento de la mancha urbana en Tula, Hidalgo ha provocado un incremento en el valor de las propiedades, por lo que en las inmediaciones, un terreno de 20×20 llega a costar 2 millones de pesos aproximadamente 5 mil pesos el metro cuadrado.

Actualmente una hectárea de terreno en esa zona se encuentra valuada en 50 millones de pesos, por lo que el valor comercial del terreno supera los 35 mil millones de pesos, una cantidad muy superior a los 1500 millones de pesos que costó originalmente.

Pesos menos

Sin embargo, el corredor de bienes raíces Mario Monter, aclara que el valor puede ser significativamente menor, “por el tamaño del terreno, la parte más alejada de la carretera tiende a disminuir el valor de la tierra, pero esa disminución sería de un 25 por ciento de su valor, es decir, el terreno estimo debería estar valuado en 25 mil millones de pesos aproximadamente, en caso que lo quieran desincorporarlo del patrimonio gubernamental”.